Dos de cada cinco personas experimentan soledad en su entorno laboral, lo que implica un reto importante para la gestión de talento, sobre todo para la integración de los equipos y el refuerzo de las conexiones sociales en un contexto de diferentes modalidades de trabajo.
La forma de trabajar y comunicarse en muchas empresas y organizaciones ha cambiado drásticamente en los últimos meses debido a la actual crisis mundial por COVID-19.
Takeaway: Medir el Clima Organizacional a través de plataformas tecnológicas evita la pérdida de datos y entrega información en tiempo real. De esta manera los líderes pueden adelantarse al análisis y encontrar insights de manera más rápida y eficiente.
Conductas como la apatía, la falta de compromiso, las luchas internas y el ausentismo, entre otras, pueden ser síntomas de un clima organizacional dañino para los colaboradores y el desarrollo del negocio.
Mantener un clima organizacional de calidad es más que un objetivo convencional de Recursos Humanos. Aunque en ocasiones es visto simplemente como una tarea de nuestra función, en realidad es mucho más.
El compromiso es uno de los factores estratégicos para incrementar la calidad, productividad y rentabilidad en las organizaciones. Sin embargo, no resulta la variable más fácil de estimular y mantener con un buen indicador.